Inspirado en Gaya, la diosa de la Tierra, esta pieza simboliza la conexión profunda con la naturaleza y la creación. Sus formas y elementos evocan la fuerza vital que fluye a través del planeta, representado la fertilidad, el renacer y el equilibrio cósmico. Es un tributo a la armonía entre el ser humano y la Tierra, recordando nuestra unidad con el mundo natural.
- Piedra golden mica 6mm
- Semillas en oro sólido de 14 K
- Placa con insignia Corso en oro sólido de 14 K
- Hilo de seda
- Ajustable